De príncipes y sapos

Bien, aquí estamos, recién divorciadas; con el ego herido, el corazón maltrecho y la cabeza......bueno la cabeza la verdad es que hace meses que no tenemos ni idea de por donde anda. Amigos y familia nos animan a salir, a seguir viviendo, a intentar normalizar nuestra vida.

Pero no es posible, no puedes normalizar algo cuando tu estás en pleno proceso de cambio. Cuando el dolor es tan grande que ocupa todos los huecos de tu existencia. La desesperación, sí, es desesperación, desconsuelo, humillación, rabia, pena, Todo eso y mucho más; pues la desesperación es una pésima consejera. Nubla el juicio y el buen entendimiento y !ay Señor¡ nos hace bajas a límites insospechados nuestras expectativas. Llegamos a colocar el listón tan bajo que es imposible bailar el limbo. Cualquier cosa nos vale, si, he escrito cosa y no persona, porque casos ha habido que realmente creo que no llegaron a evolucionar lo suficiente como para ser considerados parte del género humano.

La soledad tiende a empujarnos a los brazos del primero que pasa por allí, y es en ese momento cuando nuestro bajo listón y nuestro juicio nublado nos juegan esa mala pasada. y
 !tacháaaaaan¡

Subido a lomos de un blanco corcel y con el traje de príncipe azul recién sacado de la tintorería aparece ÉL....... nuestro salvador.......el amor verdadero.......el que tenía que llegar.
!Jo y vaya si llegó¡ como las legiones romanas siempre hacia adelante y arrasando todo a su paso, sin hacer cautivos.

Resumiendo, llega ese hombre dispuesto a hacernos felices para siempre, lleno de pasión de amor, de felicidad, que dura lo justo hasta que tú, entregado y rendido el corazón sin batallar tan siquiera, ya no eres dueña de ti, eres una muñeca en sus manos.

 Y no, ¡¡a Dios pones por testigo, no  estas dispuesta a pasar por otro fracaso, ni hablar!!, esta vez saldrá bien así que aguantas carros y carretas hasta que dejas de ser tú y ya ni tan siquiera proyectas tu sombra en la pared.

Todo esto que estoy contando me ha pasado a mí y a muchas amigas y conocidas. Nada nuevo bajo el sol.

Mi última pareja, que cuando me conoció me contaba arrebatado de amor lo mucho que le gustaba toda yo, tal y como era, poco a poco me fue modelando a su forma, no mandaba "sugería". Cambie mi color de pelo, mi corte, mi forma de vestir, mi forma de relacionarme, hasta mi forma de andar, porque resultaba demasiado sugerente para los demás hombres. Al final ni siquiera me reconocia.....de hecho aún estoy intentando volver a ser yo.

Y cuando te dejan , porque amigas así es en la mayoría de los casos, hablo evidentemente de este tipo de personajes manipuladores, no de todos los hombres en general, Que no se me altere nadie. 
Cuando sucede esto, entonces si que verdaderamente quedas destrozada, desolada como campo tras la batalla. Y es ahí cuando tienen que venir las fuerzas de rescate y apoyo a salvarte; es decir TUS AMIGAS.

Amigas incondicionales que veían lo que pasaba pero que poco podían hacer para convencerte de no seguir con él. !Amig@s benditos amig@s¡ que nos escuchan una y mil veces la misma historia, de lo bueno que parecía, de lo mucho que te quería, de los felices que fuisteis al principio, de la química brutal en el sexo, de las horas que pasabais abrazados sin necesidad de hablar y así hasta donde querías seguir imaginando.

Amig@s que te abrazan y que te suenan los mocos si hace falta. Y si suele hacer mucha falta porque ese corazón lleva ya demasiadas heridas en poco tiempo.

Y ahora toca recuperarte, encontrarte a ti misma otra vez. Toca aprender que estar en pareja no significa necesariamente ser feliz. Que merece más la pena estar sola que al lado de un cretino. Que ha llegado el momento de centrarte en ti misma y en lo que deberías hacer para poder reconquistar tu vida. Que el amor no nos recata de nada si antes no nos rescatamos nosotros mismos.

Cuando llegue el amor, la situación fluirá, eso es así de simple.

                                                  

¿Y ahora qué? ¿que sucede tras el divorcio?

Divorcio, controvertida palabra.....

Empecemos con un poquito de estadística. La media de duración de un matrimonio es de 15 años. Bueno no está mal podríamos pensar, son unos cuantos  y da tiempo a amarse y a odiarse.

Pero dos de cada 10 divorcios se producen entre los 6 y 10 años de casados, ¡las cosas ya bajan!

La edad media de las mujeres cuando se divorcian es de 40 años mientras que la de los hombres asciende a 42.

Dicho todo esto y teniendo en cuenta que la estadística es eso estadística. Afrontemos el toro por los cuernos. De cada 4 matrimonios 3 van a acabar en divorcio. ¡Muy fuerte no! Todo esto si la crisis económica actual no lo evita. ¡Haber quien se divorcia hoy en día con la que está cayendo y consigue mantener dos casas pensiones alimenticias y demás gaitas.

¡¡¡¡Ay benditos y malditos divorcios!!!!Todos (si los chicos también, no lo neguéis ) nos casamos pensando que es para toda la vida. Volcamos nuestras ilusiones y los esfuerzos en esa nueva vida en común.

Pero ete ahí que la vida por un motivo o por otro se empeña en intentar demostrarnos que nada es para siempre. Y así empiezan los primeros problemas.

Un divorcio por muy civilizado que sea siempre es un duro trance. Siempre hay uno que se adelanta y toma la decisión, siempre hay uno que ama más .....

Es casi imposible enamorarse y desenamorarse los dos al mismo tiempo. ¡Qué genial sería eso!!! Menos dolor, menos sufrimiento.

Cuanto menos tiempo de matrimonio haya pasado, cuanto menos se tenga en común y eso incluye fundamentalmente hijos, más  fácil será reponerse.  Pero ahora insisto eso es pura estadística.

El amor y el dolor que siente cada miembro de la pareja no es mensurable. Hay personas que tardan años en recuperarse de algo así. incluso algunos no lo logran nunca y se quedan anclados para siempre en ese pasado. !!Gracias a Dios!! la mayoría lo conseguimos en un tiempo razonable, entre 1 y 3 años. Tengo que decir que yo aun estoy pasando el duelo de mi última ruptura, dos años de vida intensas con hijos por ambas partes dejan huellas dolorosas de cicatrizar, !!!!y si te vuelven a dejar por otra rubia de 30 lo que te entran son ganas de asesinar¡¡¡ Pero te controlas porque tu madre te enseño a ser una dama en cualquier circunstancia.

Lo que si que podemos asegurar es que la reacción de los divorciados, tanto hombres como mujeres, se divide en dos grandes grupos:

Los que se queda en casa delante de la tele comiendo sin parar o no comiendo nada. Se alejan de amistades y se encierran en una concha, cual ostra con perla se tratara.

Los que salen a comerse el mundo, a darlo todo; a intentar ligar cada noche, los que pretender sustituir dolor por aturdimiento.

Otra característica común a ambos sexos es que nos ponemos guapísimos. Los disgustos en general adelgazan, !!!pongámonos un poco frívolas chicas ¡¡¡¡ y los gyms se llenan de divorciados machacándose el cuerpo para estar mejor y parecer mas jóvenes.

Cambiamos nuestra forma de vestir, de peinado, etc. Nos arreglamos más y en cuanto nos descuidamos estamos buscando nueva pareja.

!!!!Cuidado entonces llega el peligro¡¡¡¡

Para empezar tenemos que pasar el duelo, tenemos que sentir dolor, añoranza, pena. Es un proceso natural que nos ayuda a superar el trance. No hay que buscarlo pero desde  luego no hay que evitarlo.
 Es normal que te acuerdes de él, que a ratos le añores y le llames a gritos sollozando y al minuto le odies por todo lo malo que te hizo. Que te vengas a la mente pensamientos instantáneos sobre él que no se pueden controlar, que identifiques sitios, olores, sabores, , sonidos (las canciones preferidas, aquel concierto, aquel maldito grupo musical que tanto odiabas y ahora escuchas a todas horas )

Estamos heridos, vulnerables y con el ego por los suelos. Sobre todo si has sido engañado y abandonado por otro, como es mi caso, encima más joven que yo.

El resentimiento se queda  agazapado tras el dolor y el despecho.  Y eso amigas es una terrible combinación. . Estamos débiles, no pensamos con claridad y cuando nos damos cuenta estamos en brazos de un hombre que conoce y controla nuestras debilidades. (esto es igual para los hombres, pero seamos sinceras en mucha menor medida) y las utiliza para dominarnos.

 Él también viene de una relación fracasada, pero es el macho, no puede aceptar el fracaso.  Así que busca a alguien vulnerable en quien volcar todas sus frustraciones, miedos y complejos. Y un día estás tu preguntándote como saliste de Málaga para meterte en Malagón.

Estas relaciones tóxicas son también terriblemente adictivas; así que merecen una entrada para ellas solas, que completaremos otro día.

El divorcio, la separación o el abandono, son situaciones muy difíciles de aceptar. Son tan dolorosas que pueden llevarte a la mas profunda de las depresiones.
 Y si además tu contrincante ya ha rehecho su vida y van tan felices de la mano por la calle; lo único que quieres es matarlos, despedazarlos poquito a poco que sufran tanto como tu estás sufriendo, o por el contrario desaparecer tu y dejar de sufrir.

 !!!!Ah no¡¡¡¡¡ ni lo uno ni lo otro te iban a dar consuelo...digamos que al menos en la mayoría de los casos.

Asumir y aceptar que todo se ha terminado no es un camino fácil. Es duro, es doloroso y es largo. Pero también enriquecedor si sabes buscarle provecho.







Es el momento de hacer esas cosas que siempre relegaste con una disculpa u otra, Es el momento de retomar viejas amistades y lo que es mejor hacer algunas nuevas. Es el momento de mirarte al espejo detenidamente, viéndote por fuera y por dentro y empezar a conocerte, a entenderte y sobretodo y los más importante a quererte.

Ya se, ya se, diréis este discurso es viejo y manido, si los es. Pero no por ello es menos efectivo. Si tu no te aceptas como eres nadie t va a aceptar, si tu ni no quieres con todas tus virtudes y todos tus defectos, nadie te va a querer. Si tu no t amas por encima de todas las cosas nunca nadie te va a amar como tú te mereces.

Date tiempo después de una ruptura, para volver a encontrarte, para volver a ser tu, para volver a disfrutar de las cosas pequeñas y grandes que nos da la vida, para volver a amarte. No tengas prisa, tomate tu tiempo. No compares con nadie, somos diferentes, a unos nos lleva más tiempo que a otro y cuando estés preparada para volver a embarcarte en la emocionante aventura de enamorarte.... lo sabrás.

¡¡¡¡¡No t conformes con menos de lo que mereces!!!!!!

sobre flores y nombres

Añadir leyenda

Esta flor a la que llaman la clandestina da origen a mi nic. Me gusta entre otras cosas además de por su belleza, porque tiene una vida muy particular.

Florece de marzo a Mayo en la orillas de los ríos y bajo el amparo y la sombra de los árboles, así que es difícil de ver a no ser que estés muy atento. Creo que simboliza de alguna manera todo aquello de lo que aquí vamos a hablar. 

No es como ya os abreis fijado, la misma que tengo puesta en mi perfil pero eso es otra historia d la que ya hablaremos más adelante....

Curiosas coincidencias....

Justamente esta tarde pensando un poco en todo este lío en el que me he metido. Me llama un de mis mejores amigas para pedirme consejo.

 Una más de las mismas historias que escucho cada día y que incluso he vivido en propias carnes. Se podrían definir como inmaduros emocionales.

No quiero decir con esto que sea algo exclusivo del género masculino; por su puesto es común a ambos géneros. Pero tengo que decir que mi experiencia evidentemente más femenina, se alimenta de historias de hombres ya llegados a los 40 y absolutamente inmaduros, infantiles, inseguros e incluso acomplejados a nivel emocional.

Todo esto independientemente del nivel cultural, económico y social, se da en todos los rangos curiosamente.

¡Ay los seres humanos tan diferentes y tan iguales!

Quien no ha comentado más de una vez sobre un amigo o amiga y fundamentalmente sobre una misma:
"¿Cómo es posible que Pablo acabe dando siempre con todas las lagartas de la ciudad? 

¿pero yo es que soy tonta o tengo un problema? ¿Por qué me enamoro siempre del canalla, del inmaduro, del jeta (aquí agregar el sustantivo que mejor concuerde)

Pues no, ni Pablo es tonto ni tú tampoco. Todos y digo todos, tendemos a repetir clichés y roles.

¿No os habéis percatado nunca que el cantante Rod Stewart se casa siempre con la misma mujer? Es realmente llamativo todas rubias más altas que él y desde luego más jóvenes. Es difícil distinguir una de otra . No puedo asegurar que su carácter sea parecido pero es probable que así sea.

Pero no sólo tendemos a repetir físicos; en mi caso me vuelven loca los hombres más altos que yo, más jóvenes y con la nariz grande.
A mi amiga Sara le gustan físicamente muy trabajados y muy morenos. Todos tenemos nuestros chiches aunque a veces nos los saltemos.

 Mi última pareja con la que llevaba dos años de convivencia  me abandono por otra monísima rubia de 30, ¿Qué curioso no? ( recordáis que mi primer marido hizo exactamente lo mismo. Ahora entenderéis mi manía hacia las rubias) no era para nada mi prototipo físico, era pelirrojo y gordito lo único es que era alto y guapo.

También tendemos a repetir caracteres. Cada chico en el que me fijo es una copia mejorada, o empeorada en otros casos, del anterior. Mismas manías, mismas carencias afectivas, mismos miedos e inseguridades. Siempre voy a dar con perritos abandonados a los que rescato....

Otra de mis amigas sin embargo, va a dar con todos los jetas profesionales que la exprimen hasta que la dejan como un limón seco y hundida en el pozo.

Y según pasan los años las cosas se complican, cada vez es más difícil, encontrar algun@ que cumpla una mínimas expectativas.

Sin embargo no nos rendimos y seguimos intentando encontrar a nuestra media naranja, limón o incluso pomelo que para todos gustos hay.